Es importante conocer las regiones en donde hay más hablantes de lengua otomí, ya que en esos lugares es donde la norma tendrá mayor importancia, unificando los códigos para un mejor entendimiento.
El centro del país es el asentamiento historico de los otomís, concentrándose mayoritariamente en los estados de Guanajuato, Hidalgo, México, Michoacán, Querétaro, Puebla, Tlaxcala y Veracruz. Los otomís continúan habitando, aunque de manera distinta, la tierra domesticada, por ellos y sus antepasados. El tiempo y los procesos históricos de los cuales se acompaña han configurado los nuevos límites en el territorio y las relaciones con él. Ahora comparten la zona con otros grupos.